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Un análisis de la consultora Deloitte realizado en 34 naciones apunta que en España es donde se rellenan más casillas en la declaración de la renta, la cual incluye más de setecientos campos diferentes. El caso opuesto es China, con solo veinte. La media en cumplimentarla oscila entre una y dos horas, aunque puede llegar a cinco. En Austria, Rusia, Corea del Sur, la India, Italia, la República Checa o Suiza suele ser necesaria la colaboración de un experto para completarla.
En Holanda y el Reino Unido es individual; cada persona tiene que hacer la suya, esté soltera o casada, mientras que en España, Irlanda, Polonia o Brasil puede ser conjunta. A veces hay que hacer más de una al año. En Corea del Sur, un contribuyente, según su situación, puede tener que declarar al fisco hasta cinco veces. En Estados Unidos, Japón y Canadá hay que cumplimentar una declaración regional; en Suiza, una federal y otra cantonal. Los trabajadores autónomos de Portugal hacen una adicional.
Hoy cada vez más Estados exigen a los contribuyentes presentarla mediante un procedimiento electrónico (en España se ha implantado en 2016), pero en más de la mitad aún se recibe la documentación por correo ordinario.
Deducciones y plazos
El capítulo de deducciones fiscales es de lo más variado, y abarca desde las reformas en el hogar hasta la pertenencia a un colegio profesional. Eslovaquia, Australia y Chile no incluyen una desgravación de impuestos.
Y si se presenta fuera de plazo, lo normal es que se aplique una sanción (España, Francia o Reino Unido). En Alemania se puede hacer con una justificación, y en Bélgica, Holanda y Suiza es posible solicitar una ampliación de plazo.
Fuente: Muy Interesante
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